En ocasiones las emociones se desbordan y nos controlan. Sufrimos llorando, gritando, protestando, o entrando en pánico. Crisis de ansiedad, de llanto, ataques de cólera, son ejemplos de raptos emocionales que secuestran nuestra conciencia. En esos momentos no somos libres. En esos momentos estamos bajo el yugo de creencias que nos hacen sufrir, y que no nos planteamos. Podemos pasar horas llorando y sufriendo en soledad, horas en urgencias en el hospital con una crisis de ansiedad, u horas bajo la cólera destrozando nuestras relaciones con las personas que más amamos. ¿Podemos hacer algo?
Sí, claro que sí. Para empezar si practicamos a diario la meditación es poco probable que tengamos esas crisis. Esos problemas se dan, siempre, cuando hace tiempo que hemos abandonado la práctica. La meditación es como una higiene de nuestra mente que debemos realizar a diario. No es buena idea descuidarla. Como tampoco lo es dejar de lavarse los dientes, o dejar de comer.
En el vídeo propongo una de las estrategias que podemos utilizar en esa situación. Hay otra más que podemos usar, pero esta es la más fácil.
Para prevenir: practica a diario tu meditación. Y si todavía no estás muy fuerte y surge el Rapto Emocional, entonces utiliza este remedio y verás los buenos resultados.

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